LISTONES PARA BIBLIOTECA

Hoy os traigo una idea muy buena que cogí prestada de mi anterior cole, Francisco De Luis, para bajar con los alumnxs a la biblioteca del cole sin que ello supusiera un caos con respecto a la organización de libros.

En esa biblioteca no tenían todavía una persona que se encargara de ordenar los libros, por lo tanto os podéis imaginar lo lioso que podía llegar a ser bajar con todxs lxs alumnxs y que cada cual cogiera un libro o dos y después no se acordara de dónde estaba colocado.

Pues bien, a una profe se le ocurrió hacer esta maravillosa idea ¡que vino de perlas! Y ahora yo la he llevado acabo también en el centro en el que estoy ahora.

Se trata de unos listones hechos de cartulina, decorados por ellos mismos y posteriormente plastificados. Su uso es muy simple pero súper imprescindible (en la biblioteca de este cole tampoco hay una persona encargada de ella).

Así que cuando bajo con todo el aula, me facilita muchísimo el trabajo, tanto a mí como a ellos, ya que así dejamos la biblioteca tal cual nos la hemos encontrado.

¿Cómo se usan? Pues muy sencillo: cada vez que alguien coge un libro, coloca su listón en el lugar en el que se encontraba colocado. Así, si se aburre de leerlo o lo termina, va a lugar donde ha colocado el listón y vuelve a colocar el libro en su lugar. Así no hay despistes posibles.

Nosotros empleamos una sesión semanal en bajar a la biblioteca, yo les digo que es «nuestro momento de relax de la semana». Al principio se alteraban mucho y no paraban de hablar entre ellos, coger veinte mil libros… pero ahora que se han acostumbrado, les encanta y están súper concentrados en lo que hacemos.

En el anterior cole, al hacerlo todo el colegio, cada curso tenía los listones de un color, para saber de qué clase es cada uno.  Nosotros los hemos colocado en el aula y cada semana una persona es la encargada de repartirlos y de recogerlos al terminar la hora.

Eso sí, la próxima vez que haga listones los haré más largos, que a alguno ya se le ha perdido el listón entre los libros por dejarlo demasiado metido… ¡menos mal que al final los acabamos encontrando!

La verdad es que me parece genial la idea de los listones, ¡no me podía quedar sin enseñárosla!